viernes, 26 de junio de 2020

¡Anímate!: Kannazuki no miko (S01/E04)






Una entrada más para el Pride2020... ¡qué bonito es traer material así, lindo y entretenido!... bueno, pero no voy a entretenerlos mucho acá, mejor pasamos al contenido y que lo disfruten y lo vean... por favor, vean el anime, porque es bueno, bueno, bueno.


Amo tu voz. Me encanta esa fuerte, clara y pura voz tuya que resuena en mi corazón.

Cuarto capítulo, “La dirección del cariño”, ay, que esto se va poniendo más complicado; el poder de las sacerdotisas aumenta y con ello la unión entre ambas, a la par que los problemas y las responsabilidades, mientras se ocupan de proteger a la gente y a los que aman. Himeko sigue siendo la chica que se minimiza, mientras Chikane no se cansa de dejar bien en claro que lo que ella es, es gracias a su presencia, los lazos entre ambas se fortalecen, aunque eso quizá a la larga no sea precisamente lo mejor… ¿ya les hablé del opening?, no es como si fuera de mis favoritos, pero sí merece una mención especial, sobre todo porque creo que erróneamente, le han metido un avance de la trama fundamental ahí, vemos sí la lucha entre los Oroshi y las Sacerdotisas y a Souma luchando por Himeko mientras Chikane hace lo propio, pero entonces hay un parpadeo a una batalla entre ambas y ahí empieza a decírsenos algo antes de tiempo.

Este capítulo casi da inicio con la presencia de Souma en casa de Chikane para buscar a Himeko, cosa que a la otra deja algo incómoda; el muchacho ha ido para invitarle a salir a un parque, esto hace que sí se alegre, pero también pone una especie de velo entre las dos muchachas, uno que más que nada pone la propia Himeko, ya que Chikane hace todo su esfuerzo por apoyar a su amiga, pues una cita con el chico no es cualquier cosa; Himeko pregunta a Chikane sobre los rumores de que ella y Souma son algo, pero Chikane los desmiente de inmediato y la anima a salir con él, a aprovecharlo. Chikane en serio está interesada en que Himeko sea feliz, así que la impulsa en todo lo que hace.

Otoha la criada de Chikane aprovecha hasta la mínima oportunidad para avergonzar a Himeko, pero esta está tan concentrada en ayudarla para su cita, que no le da importancia y le apoya en todo, incluso dejándole ropa para que pueda ir bonita a encontrarse con Souma; por un trauma de infancia, Himeko detesta que le toquen el cabello y eso propicia una escena curiosa con Chikane, que no entiende el rechazo al desconocer el antecedente, irónicamente, lo que había sido una sesión sumamente íntima entre ambas, acaba arruinada por aquella experiencia extraña y una nueva cuerda las empieza a dividir. Mientras estas cosas banales o infantiles ocurren, en el resto del mundo los Oroshi empiezan a hacer destrozos, todo sólo para atraer la atención de Souma y preparar el camino para destruir a las dos chicas; cuando Himeko al fin se marcha a su cita, Chikane tiene un arranque y casi se atreve a detenerla, pero de inmediato se obliga a resistir y prefiere simplemente dejarla irse, convencida de que Himeko quiere a Souma.

¿No tienen suficiente drama?, ¿parece esta una simple historia de máquinas enormes buscando salvar el mundo? Tranquilos, les recuerdo que esto es un YURI… oh sí, ya viene drama, ya viene romance, ya vienen contradicciones y cosas así, sólo aguanten. 

La neta es que esos dos hacen una muy linda pareja, pero son excesivamente bobos, peleando por ver quién come primero y luego por quién se come lo que se quemó por estarse peleando antes, son unos bobitos; mientras ellos bobean, pasan dos cosas importantes acá: Tsubasa-kun el hermano de Souma se aparece por el templo, queda ya claro que lo que ocurre es que él también es un Oroshi, así que lo anda buscando para enfrentarse o bien, para tirar de él hacia el lado malvado de esta batalla; el otro asunto, es que Chikane está sola en casa, pensando y repensando en Himeko, dándole la vuelta a las cosas constantemente y convencida de que necesita a la ausente chica, pero sobre todo, que tiene que ayudarla y protegerla.



Souma y Himeko terminan su cita de forma hermosa viendo un atardecer y pensando en su niñez, cuando ya eran amigos y hacían cosas juntos, así en los colores rojos que tiñen la ciudad, Souma le da a Himeko un atrasado regalo de cumpleaños, un broche para el cabello que ella valora muchísimo, pero lo curioso es que ella habla de lo mucho que ama a las personas, a Chikane y a Souma, y cuando él le pone el broche en el cabello, ella no tiene la reacción que tuvo con Chikane antes y eso nos deja pensando; sin embargo la cita no cierra de buena manera, pues a mitad de ella, así sin previo aviso, aparece Tsubasa, montado en su súper robot para hacer frente a su hermano o bien, para obligarlo a hacer daño a la Sacerdotisa del Sol, yendo incluso por sobre sí mismo.

Y sí, aquí termina el capítulo… ¡oh Dios!... ¿y el ending? :3... No, pero ya no puedo hablar del ending, sólo recuerden que es una joya por favor, véanlo y disfrútenlo porque en serio, conmueve y emociona siempre que se le ve; hablemos ahora de cómo vamos con esta historia.


Creo que lo que debemos de rescatar es por supuesto al personaje de Chikane, para algunos será como el extremo y lo es, porque no para de sufrir, esta mujer en serio no para de sufrir, es el personaje a mi gusto más complejo y completo de este anime, más adelante veremos y vamos a comprender mucho del porqué; mientras tanto, podemos distinguir en Chikane a una chica que sufre porque quiere, así de simple, ella sufre porque sabe que no es lo mejor para quien ama, así que prefiere alejarse, se hace a un lado y la deja ser feliz, porque eso es lo que necesita y merece. Y con eso en mente, puedo decirles que este capítulo se merece un buen 9.8... y por favor, vean el que sigue y nos vemos aquí, para más geniales capítulos de anime. Acá les espero :P

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