Pues volvemos a la serie ya en su recta final, estamos a un par de capítulos de acabar, o bueno, mejor dicho, a un par de reseñas de concluir con esta serie que seguramente, dejará buen sabor de boca en cualquiera que desee verla; vamos directo a la trama, porque este es un capítulo bastante bueno:
-¡Papá ¿qué estás diciendo?!
-Sí, puede ganar mucho dinero... ¿qué no sabes todo lo que pagan los políticos por un buen privado?, sueltan los billetes y los narcos las pacotas...
-¡Papá por Dios, no me hagas dudar del futuro de mi hija!
Pues mientras el abuelo intenta convencer a Martina de dejar la escuela para volverse exótica en algún antro, descubrimos que Renata ha estado inquieta y rara, por lo que decide hacerse unos estudios de sangre, los que va a ir a recoger la Nena, quien a su llegada a la casa, pasa como una desconocida ignorando a todo mundo; el problema de la Nena es mayúsculo, le pasó lo que a Plutarco y Gaby, ha salido embarazada fuera de matrimonio y ahora tiene que avisarle a su adorado Aldolfo, el que como buen hombre responsable, le avisa que va para la casa a darle frente a las cosas. Mientras Nena intenta contener la boca floja de Plutarco (que para su mala suerte escuchó lo del bebé mientras se "despedía" con Gaby), la familia es convocada a cenar y Gabriela se ve en la penosa necesidad de darle semejante golpe a su adorado príncipe, haciendo más que evidente para todos, que algo está pasando.
El asunto del capítulo es una serie de enredos en que todo mundo piensa que la que está embarazada es Renata, cuando la embarazada es la Nena, y así se desata quizá una de las partes más divertidas del capítulo y quizá de la temporada:
El asunto del capítulo es una serie de enredos en que todo mundo piensa que la que está embarazada es Renata, cuando la embarazada es la Nena, y así se desata quizá una de las partes más divertidas del capítulo y quizá de la temporada: