"Los rudos comen gomitas" El Lado Profundo del Mar, Reseña

 ¿Qué pasaría si desapareciera tu hijo?

Así sin más, sin dejar un solo rastro, es lo que le pasa a Beth (Michelle Pfeiffer) en esta película de 1999 y que pueden encontrar en algunas plataformas para disfrutarla, bueno si es que se puede disfrutar una historia así, aunque es realmente buena; recuerdo que la vi hace ya bastantes años y me gustaba verla cada tanto, porque es un melodrama de esos que de verdad pegan. Basada en una novela de Jacquelyn Mitchard que lleva el mismo nombre, El lado profundo del mar o en su nombre original The deep end of the ocean, es una historia que atenta contra la tranquilidad de cualquier madre.

Beth sale de casa con sus tres hijos en dirección a una reunión de generación escolar, la idea es pasarla bien con sus viejos amigos de colegio y divertirse con sus hijos; a su llegada, su mejor amiga ya la está esperando, una niñera y saludos le permiten irse adentrando en la reunión, pero es notorio que no está cómoda con algo: hay demasiada gente, tanta que teme meterse entre ella porque sus hijos van con ella. Ben el de en medio tiene apenas tres años, Vincent debe tener más, unos seis a siete... y mientras ella se aleja dejando a Ben a cargo de Vincent, los pierde de vista ya así como así, sin saber bien a bien, Ben desaparece.

Las cosas sólo empeoran luego de eso, Beth debe lidiar con la angustia de no saber qué pasa con su hijo, no saber dónde está, cuál es su paradero, qué le ha pasado; la gente se une, hay grupos de búsqueda, la fotografía del niño aparece en televisión, en revistas, la gente se congrega... por algunas semanas y meses... porque luego la novedad pasa, el niño se ha perdido por demasiado tiempo, la angustia en la gente desaparece, pero no en la madre, en ella nunca. Beth debe lidiar con una vida normal, con sus otros dos hijos, con su marido, con su trabajo, pensando siempre en que no sabe qué fue de su hijo mejor, no sabe dónde o cómo puede estar, y debe vivir con ello, aceptarlo y continuar.

Diez años después por casualidad y ya viviendo en otra ciudad, Beth ve a un joven que le parece es su hijo, al principio está muy segura y empieza a fotografiarlo, luego empieza a sentirse incrédula, pero para entonces, otras personas, su esposo Pat y la oficial a cargo del caso, coinciden en que hay un real parecido entre Ben de acuerdo a las proyecciones a futuro hechas por el FBI y el joven al que acaba de conocer; finalmente y buscando, descubren que en efecto el pequeño Sam es aquel hijo extraviado nueve años atrás, pero recuperar al niño no consiste únicamente en encontrarlo, hay mucho más allá de eso.

¿Es una buena película?, sí, lo es, muy recomendable, de hecho los actores jóvenes ganaron algunos premios por su interpretación en ella, lo que garantiza que es una buena cinta, para mi gusto, el elenco es lo bueno, la trama super complementa y la historia, vamos... está bastante bien. Si tienen ganas de un drama bien hecho, con golpes emocionales importantes, esta es la película; la Pfeiffer, bueno, es la Pfeiffer, qué podían esperar de ella y Whoopi... increíble como siempre.

Por favor, véanla, disfrútenla, sé que les gustará y pueden luego venir a contarme qué les pareció. Pero por favor, háganlo.