jueves, 7 de febrero de 2019

Pre-reseña Cold War


Estoy preocupada...



En serio, lo estoy y quizá no debería estarlo, tal vez es que me hace falta ver la película unas cinco, siete o quince veces más, no lo sé... pero estoy preocupada.
Esto comprende una pre-reseña con la esperanza de que pueda hacer algo mejor y más grande, así que esta es una mera impresión de haberla visto recién hace dos días y digerirla un poco...


Y sí, insisto, estoy preocupada...

Ahí ya dice la raíz de mi preocupación en la imagen principal "Una historia de amor imposible en tiempos imposibles"... y me empiezo medio a crispar, "Historia de amor imposible"...

Vi la película y quedé maravillada por su belleza, la estética de cada toma es un hecho irrefutable, es hermosa; las tonalidades, las fotografías, incluso la cinematografía y la música, los vestuarios formidables, en serio, la película merece estar nominada por su calidad visual, es una obra maestra del cine actual.

Pero no me la vendan como una historia de amor, ni me la estrenen el 14 de febrero ni me digan que es la historia de amor moderno que viene a revitalizar el género romántico; ¡Por favor no hagan eso!

Voy a ser sincera, cuando acabé de verla me solté a llorar y no sabía porqué, no era que me conmoviera la historia, no era que me desgarrar el final, no me pasó como con Roma que sentí que tenía que llorar ante la catarsis que hace uno con la conclusión de la historia, no, eso no ocurre aquí; siendo muy sincera no me identifiqué con los personajes, no me golpeó su realidad o su naturalidad, su historia de amor no me parece ni siquiera un verdadero romance.

Hablamos de una mujer que se "enamora" de un hombre y en el camino de su relación lo va vendiendo con sus enemigos políticos, hablando de él, claro, lo que sabe que conviene decir de él, ¡pero hablando de él, siendo espía en su contra!; luego tenemos a este hombre, que busca fugarse con ella y no lo logra y se va a vivir la vida del artista para encontrarla de nuevo años después. Ok, hasta aquí vamos bien, pero ¿y lo demás?

Separados por la situación política eligen buscar la forma de llevar más allá su pasión artística y así los vemos metidos en un círculo de obsesión, de vender el cuerpo para obtener favores musicales o pelear hasta golpearse o casarse con alguien más y tener sus hijos para que el otro salga de la cárcel. Sí, acúsenme de romántica empedernida y lo soy, no voy a aceptar este tipo de romance en el que se aman pero se venden, se dan la espalda, se abandonan un lustro y regresan después amándose y hacia el final de la relación se quieten disparar en la frente uno delante del otro en honor a su amor... 

¿Cuál amor?, ¿el de las noches de sexo?, ¿el de los hijos de otros?, ¿el de escápate conmigo?, ¿el de no me escapo contigo porque no soy suficiente para ti, aunque luego vaya a buscarte sabiendo que sí eres tú suficiente para mí?

No sé, tengo mis dudas y es este un comentario visceral... merecida la nominación al Oscar 2019, merecido el estar ahí... algo hermoso merece quedarse ahí, pero no es quizá la versión revolucionaria del amor, así sea una metáfora de la Guerra Fría... no lo merece porque es como lo que se hizo con 50 sombras de Grey, romantizamos algo que no debe ser.

Por cierto, la canción es hermosa.

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