Creo que no he visto otra película que me deje una sensación tan rara como esta... cuando uno ve Perfume de violetas, le deja un sabor de boca amargo... amargo y raro... a decir verdad es una de esas películas curiosas que dan ganas de ver varias veces y que reflejan perfectamente la realidad de México, del México mágico que sólo los más mexicanos conocemos; así pues les traigo este comentario/reseña de la película, esperando que les pueda gustar... y que los inspire a ver la cinta un día de estos.Protagonizada por Ximena Ayala y Nancy Gutiérrez, de la mano de actrices reconocidas (mucho pegado con bastante) como María Rojo y Arcelia Ramírez, esta película del año 2000 que forma parte de una trilogía de Maryse Sistach quien la dirige, presenta la situación problemática y agravante de las mujeres en los sectores más marginados del país (sí, esta frase me la leí por ahí en un artículo de periódico y se me quedó grabada); el título de la película tiene que ver con uno de los primeros contactos de las dos muchachas: Yessica (Ayala) es una joven poco social y bastante agreste, que tiene que enfrentarse a una nueva escuela luego de que su madre (Rojo) la cambiara por problemas escolares, entre sus nuevos compañeros se encuentra Miriam (Gutiérrez), una chica retraída, tímida y "bien criada", a la que su mamá (Ramírez), madre soltera empleada en una zapatería, sobreprotege.
La película fue producida por un sinnumero de productoras, avalada instituciones nacionales que permitieron que en la entrega del Ariel del 2000, ganara en la categoría de mejor guión a la arrasadora Amores Perros; lo cierto es que la historia, que se inspiró en un caso de nota roja de por allá de los 80's, es además de entretenida y emocionante, un motivo para la reflexión seria y detenida. En algún momento espero poder traerles las otras películas que forman la trilogía de Sistach, que son Manos libres y La niña en la piedra, pero por ahora comentemos esta nada más.
Vamos a la historia como tal: Yessica al fin se adapta al grupo gracias a Miriam, volviéndose amigas inseparables en una amistad con atisbos de relación un poquito más allá, en lo personal, Yessica tiene un comportamiento que cae en el exceso en cuanto a su cercanía con Miriam y ésta, como no está precisamente muy acostumbrada a tener amigas, se presta a ello sin el menor recato; Yessica viene de una familia sumamente problemática, una madre que volvió a casarse y la hace convivir con un padrastro y un hermanastro que, sobre todo el segundo, no tienen precisamente muy buena idea de la muchacha. Miriam vive sólo con su madre, una mujer que aunque es bastante normalita y agradable, así como afectuosa con su hija, también se pasa un poquito con sus prejuicios y sí, es bastante sobreprotectora con su hija.
Así pues, ambas van conociéndose e interactuando, fortaleciendo su amistad lentamente a la par que cosas a su alrededor, ponen en el empedrado de modo que el final nos resulte muy, muy impactante; el hermanastro de Yessica le tiene mala fe, así que en su deseo de comprarse unos tenis, "vende" a la muchacha con su patrón, un chofer de microbús que no se lo piensa dos veces y abusa de ella en un baldío, mientras el muchacho vigila que nadie los descubra.
Avergonzada, herida y desconcertada, Yessica se refugia en Miriam, quien sin saber las dimensiones de lo ocurrido le ofrece un apoyo sincero, pero no adecuado (claro, a su edad ¿quién va a saber qué hacer?, estamos hablando de chicas de secundaria, si a mi edad, no sabría bien a bien qué hacer, ¡imagínense!); ambas lidian con el asunto como pueden, siguen con sus vidas normalmente y aunque ya la amistad que tienen le está causando problemas a Miriam con su madre, ésta se aferra a la relación y se queda metida en ella. El hermanastro de Yessica se las ingenia para ir mermando la imagen que tienen de ella sus padres, haciendo que empiecen a rechazarla más, poco a poco, las dos muchachas se aproximan a un trágico final; es así como una tarde mientras van a un mercado, Yessica cae en la tentación y se roba un perfume de violetas, el mismo aroma del cabello de Miriam, el problema es que ésta no corre con la misma velocidad, la atrapan, la acusan de ladrona y ella debe enfrentar lo que su amiga hizo.
Por si eso fuera poco, buscando reconciliarse con ella, Yessica vuelve a la casa a llevarle un regalo, pero en el camino decide robar los ahorros de la mamá de Miriam para dárselos a su mamá y ayudarle así con los gastos de su casa; Miriam enfrenta el enojo de su madre y esto provoca que ella tenga una platica con ella en que define a la otra joven como una ladrona y cualquiera (dicho más feo) y así, dispone a su hija para el cierre de la historia.
Perfume de violetas definida con la frase "nadie te oye" es precisamente eso, una manifestación de cómo la juventud mal orientada y necesitada del país debe enfrentarse no nada más a las desavenencias de un mundo para los pudientes, sino también del desapego de los que deberían protegerles: maestros, familia, gobierno, personas; las madres de esta película se apartan de sus hijas y les llenan la cabeza de prejuicios y malos consejos, los maestros reprenden intransigentes y agreden con suma violencia, el gobierno desatiende descarada y cinicamente, las personas miran con incredulidad y permiten el daño a los demás ignorando lo que es claro y permitiendo el crimen, la impunidad.
Definitivamente es una película para ver, analizar y reflexionar, véanla, acá les dejo un link para ello, disfrútenla, revísenla; en lo personal le doy un 9.7, y no me voy sin decir que el final, con ese encuentro entre victimaria y víctima que antecede a la llamada que anuncia el homicidio, es verdaderamente impresionante. No lo duden, les va a gustar.
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